lunes, 23 de febrero de 2009

Iemanjá y todos los orishás homenajeados en el carnaval de Río de Janeiro 2009

No sólo la Reina del Mar, muchos de los orishás, exús y pombagiras, caboclos de Umbanda y hasta Zé Pelintra y sus malandros están por estos días siendo homenajeados en los principales carnavales brasileños: el de Río de Janeiro y el de Sao Paulo.

Lecy Brandao da Silva, la cantante y estudiosa tanto del carnaval como de los cultos afrobrasileños -devenida ya hace varios años en comentarista de la Red Globo de TV- dio cátedra de su sabiduría las noches de viernes y sábado en el Sambódromo da Anhembi, principal arteria del desfile de las escolas do samba paulistas. Nos enseñó a todos, como siempre, aspectos ignorados de la riqueza cultural de la Umbanda, el Candomblé y las vertientes menos conocidas de los cultos afrobrasileños. Se la notó muy emocionada cuando la comparsa "Leandro de Itaquera" comenzó a entonar el samba enredo:

"É a fé, muito axé, abenção meus orixás
Gira aí, diz no pé, energia... Saravá
Ah! Seu zé, mas quanta alegria
Swinga majestosa bateria"



Y tras recordarnos la figura legendaria de la entidad umbandista Seu Zé Pelintra y su hermano gemelo Seu Zé da Fome comenzó a explicarnos qué reclama esta comparsa de las periferias de Sao Paulo, qué necesidades tiene la gente de las favelas y por qué depositan su fe en los orishás como único recurso para continuar viviendo.

Con el desfile de Unidos da Peruche, otra de las escolas de samba que este año vuelven al desfile del grupo especial del carnaval paulista, Lecy Brandao pudo recordar a su madre Oxum (recordemos que la cantante es hija de Oxóssi y Oxum), quien estuvo presente en todo el desfile. Desde el samba enredo hasta el último de los carros alegóricos...

"Brasil, o reino encantado
Brasil, gigante explorado
A esmeralda conduz a obra de um grande poeta
Aos olhos de Oxum, no canto do negro o ouro luziu
E no caminho das águas o diamante brotou
Existe a consciência que a natureza implora
É tempo de preservar, essa é a hora..."



Por fin llegó el gran día. Se inició el desfile del Mayor Carnaval del Mundo. Y la escola de samba encargada de abrir el desfile fue Imperio Serrano quien reeditó un samba enredo del año 1976 que fue grabado por Clara Nunes, Marisa Montes y varios otros cantantes brasileños.

La carroza "Abrealas" trajo un inmenso Neptuno rodeado por caballos blancos anunciando el desfile que estaría lleno de imágenes de mitos sagrados y animales marinos surgidos de la letra de "Lendas das Sereias, Mistérios do Mar" que fue coreado por la inmensa cantidad de gente reunida en la Avda. Marques de Sapucaí.

La comisión de frente presentó a Iara, la sirena de agua dulce rodeada de defensores que le "batían cabeza" mientras varios caballos marinos la rodeaban, quizá reclamándole su presencia junto a las otras sirenas, las marinas, que comenzaban a desfilar...



Y estuvieron todas, sea en los carros alegóricos o fantaseadas en los destaques que sambaron por la noche...

Sobá, la que se traslada en una concha marina.
Caiala, la que vive en los castillos de arena.
Ogunté, la que danza al ritmo de las aguas pero vive en el mar más profundo.
Inaé, la que se cubre de espuma blanca pero prefiere los mares tropicales, las aguas poco profundas y los corales.
Oloxum, la que con su espejo captura los reflejos de la luz en las aguas marinas y habita en aquellos sitios cristalinos.
Janaína, la más rica de todas, dueña absoluta de los tesoros hundidos en el océano.
Marabó, la que custodia las aguas peligrosas.

Al final del desfile, los últimos grupos aparecían vestidos de blanco simbolizando las ofrendas a Iemanjá, que fue representada en la última carroza, con una estatua gigante de la diosa que -a modo de purificar el mundo- vertía agua de sus manos.

El propio presidente Lula y su esposa Marisa Letícia no pudieron contener la emoción y bailaron desenfrenadamente al ritmo maravilloso de esta escola de samba, imitados por Sergio Cabral, el gobernador de Río, y Eduardo Paes, el intendente de la ciudad carioca.